El camino es largo, pero las recompensas son inmensas
Lejos, lo más difícil de los idiomas es empezar. Pero dicen que “el primer paso es el más difícil”. Una vez que hemos elegido el idioma a estudiar, empezaremos como primer paso con el vocabulario, usando el software Anki. Con ello ganaremos una buena base de palabras. Aprender un idioma no es una carrera de 100 metros planos, es una maratón. No tenemos un gran apuro porque estamos en Chile, no vamos a viajar todavía. El lema es: “sin prisa pero sin pausa”.
Luego de un mes o menos si están muy impacientes, pueden tomar alguno de los números cursos gratuitos online que se ofrecen. Yo recomiendo Duolingo o pueden visitar los recomendados aquí. Con esto empezarán a aprender la gramática. Verán que ya al saber las palabras, se les hará más fácil las lecciones. Cuando estudié alemán, mis compañeros al no usar Anki perdían mucho tiempo buscando el significado de las palabras de la lección, porque ya se les había olvidado.
La pronunciación es sumamente importante. Si no los entienden, no se comunican. Para ello, pueden practicar con canciones en el idioma estudiado, estudiar con material en línea gratuito o adquirir un libro de pronunciación. De los libros, les daremos recomendaciones en la sección recursos, o visiten directamente una biblioteca o centro cultural y pidan una recomendación.
A modo opcional, si desean hablar rápidamente, se pueden conseguir libros de oraciones. La editorial Lonely Planet ofrece libros de oraciones, con las preguntas típicas de nombres, cómo pedir comida, consultas en un hotel, etc. Es bueno si quieren sorprender a alguien. Es como “cocinar” un idioma. En el lado negativo, quedarán limitados a las oraciones que ofrece el libro y aun así debe aprenderlas.
Para leer, pueden comenzar con libros para niños. ¿Para niños? Sí, porque son fáciles, con un vocabulario básico, lleno de dibujos y divertidos. No estudien aburridos libros de gramática porque se van a desmotivar.
Podemos ver películas o series en el idioma que estudiamos. Se aprende y sin dolor…
Ya con tres meses de estudiando con Anki, tendrán un buen vocabulario y podrán empezar a entender lo que escuchan. Es necesario ponerlo en práctica. Un aspecto fundamental, que no se suele explicar, es el de crear un ambiente propicio. Si no puedo viajar al país, el país viene a mí. ¿Qué significa eso? Simplemente que dentro de nuestro entorno, ya sea en el hogar, lugar de estudio o trabajo, comenzaremos a “exponernos” al idioma. La clave es la inmersión. A modo de ejemplo:
-escuchar canciones
-escuchar podcast
-ver películas
-leer cómics o chistes
-tener el teléfono en el idioma estudiado
-tener el computador, programas y juegos en el idioma a estudiar
Haciendo memoria, yo mejoré mucho el inglés porque en la universidad tuve que leer muchos escritos de economía en ese idioma. Pero fue algo casual. Hoy, tengo todos mis juegos de computador en francés. Los compro en Steam, compro siempre en liquidaciones y me salen baratos. Estos juegos vienen en muchos idiomas. Así practico, aprendo y no siente que estoy estudiando. Mejor aún, los juegos vienen subtitulados.
Así, debemos practicar diariamente, por ejemplo, en horas de almuerzo, cuando estamos solos. Lo ideal es poner atención, ya que usarlo como música de fondo no ayuda. Es simular que estamos en otro país, donde no tenemos más remedio que aprender el idioma.
“Espartaco y el Sol bajo el Mar” fue una serie muy popular en Chile en los 80′. Es francesa y gracias a Youtube pude verla nuevamente en su idioma original.
En un principio, no entenderemos mucho, pero no hay que desanimarse. Primeramente, existen páginas web para principiantes, con el audio claro y más lento. Una buena forma de comenzar es con dibujos animados, como las películas Disney, porque el vocabulario es sencillo y la pronunciación muy clara. Incluso podemos volver a ver en el idioma original nuestras series infantiles. En mi caso disfruté mucho ver “Espartaco y el Sol Bajo el Mar” en francés (Les Mondes Engloutis). Quienes aprendan inglés pueden repetirse aquellas series que recuerdan con cariño, con la ventaja que sabrán de qué se trata el capítulo. La idea es entender lo que escuchan. Si algo no queda claro, lo repiten. Busquen material con transcripciones, podcasts con audio y transcripción. Vean películas con subtítulos, en el idioma que están estudiando. Las pueden pausar, no hay problema. Estamos aprendiendo, no luciéndonos.
Si hay algo que no entiendan, anótenlo y pregúntenle a alguien experto o nativo parlante. Al comenzar no esperen entender mucho. Sin embargo, poco a poco entenderán unas palabras sueltas, para luego entender palabra por palabras sin alcanzar a dar sentido a la oración para finalmente no tener problemas en la comprensión oral.
El principiante requiere de mucha ayuda. Es bueno tener cerca a un profesor, extranjero o amigo que nos ayuden con las primeras dudas. Es totalmente desaconsejable el ser totalmente autodidacta. Solo se aprende más lento y más aburrido. Recalco tanto la importancia de esto, que escribí otro artículo.
Respecto a la gramática, no es necesario en esta etapa darle énfasis. Es suficiente con las páginas web que ofrecen numerosos cursos gratuitos. No compren libros ni paguen por ello. Pero deben aprender algo de gramática al menos.
Si tienen un profesor, les recomiendo que sea hispanoparlante y no nativo. ¿El motivo? Un profesor también fue principiante y sabe las materias más difíciles de aprender para el alumno, a diferencia del nativo parlante. Empatizará con ustedes y pondrá énfasis en las materias más difíciles. Por ejemplo, ¿saben ustedes la parte de aprendizaje más difícil del español para los extranjeros? Busquen en nuestra sección de profesores alguno de su conveniencia.